Parque Chacabuco: abre SuperBatuque, el primer museo porteño del juguete

La Ciudad de Buenos Aires está de estreno. El miércoles 15 de mayo abre sus puertas SuperBatuque, el que será el primer museo porteño dedicado al juguete. Está en Picheuta 1685, en Parque Chacabuco (Comuna 7).

Demián Ventura es artista plástico, coordina retrospectivas y colabora en conservaciones. Tiene 39 años y es el director de este flamante museo. “Es un espacio sin fines de lucro. La idea del museo es apelar a los recuerdos de la gente que viene de visita. Hay una selección de juguetes clásicos de cada una de las épocas, entre mediados del siglo pasado y fines de los años 90; conservar juguetes es dar testimonio de una época y una forma de vivir y hacer las cosas”, dice a Agenda Porteña.

“Trabajo con el fruto de mi trabajo, lo voy armando, a pulmón. La idea es que la gente lo pueda visitar. Trabajaríamos los sábados de 14 a 19. También habrá visitas guiadas a las escuelas durante la semana”, agrega.  

Ventura colecciona juguetes desde hace dos décadas. Muchas de estas piezas están ahora en exhibición. Incluso hay algunas piezas que conserva desde su infancia. Incluso Batuque (barullo en lunfardo), que da nombre a este flamante espacio porteño. Se trata de un perro de industria nacional, uno de sus favoritos.

Las figuras se reparten entre vitrinas de metal y muebles de madera. El orden, lo meticuloso sobresalen y hacen que los detalles y cualidades de las piezas se puedan apreciar.

Se destaca una colección de figuras de Superman, incluso una de tamaño real. Algunos son articulados y otros son esculturas. Este héroe de DC es también que da nombre al museo porteño.

Otra colección que sobresale es un conjunto de figuras de Titanes en el Ring, el recordado espectáculo de lucha libre. En línea, se ve una vasta presencia de muñecos del videojuego Mortal Kombat, muy popular a mediados de los noventa.

Sobre los años ochenta se aprecia un lote sobre Locademia de Policía (fabricado por Jocsa), la saga de películas humorísticas que satirizaron al brazo duro de la ley. Hay figuras individuales y también está en exhibición la cárcel, uno de los grandes tesoros que divirtió a los niños en aquella época.

También se ven piezas de superhéroes de los años 90, camiones de plástico, Enanitos (al estilo de los de Blancanieves).

La lista es larga y, como todo museo, lo lindo es perderse entre sus recovecos. En SuperBatuque falta menos para poder hacerlo.

“El objetivo que me puse tres años atrás cuando empecé con este proyecto es que haya un lugar para mostrar el vínculo entre el juguete y la educación, también un lugar de esparcimiento, para visitarlo y que los niños vean qué usaban sus padres y abuelos, generar un vínculo entre generaciones desde el juguete”, concluye.

Fuente: Agenda Porteña