Un panteón en el cementerio de la Recoleta cuesta igual que una residencia de lujo enfrente

Cotizan desde u$s200.000, lo mismo que un departamento de 50 metros cuadrados en la zona.

Cotizan desde u$s200.000, lo mismo que un departamento de 50 metros cuadrados en la zona.

Adquirir un panteón de 20 metros cuadrados en el cementerio de la Recoleta cotiza u$s200.000, lo mismo que una residencia de lujo de 50 metros cuadrados en el flamante proyecto Lola Recoleta Furnished by Armani de Roberto Ortiz esquina Guido (ex restaurante Lola), ubicado enfrente. Ambos son buscados por igual, por eso hay pocos panteones disponibles y del flamante proyecto de lujo ya se ha vendido el 50% de sus unidades, informa BAE.

El panteón alberga más de 20 ataúdes. Requiere el pago de una tasa de ABL y un cuidador. Mientras que el lujoso departamento ofrece entre sus amenities salón, piscina descubierta climatizada, solarium, gimnasio, health club, seguridad las 24 horas, sauna, piscina relax cubierta, sala multimedia, hall doble altura y detalles de lujo, también con frente de mármol, añade el texto citado.

Desde el sinceramiento fiscal del último semestre de 2016, los apellidos más ilustres de la ciudad decidieron tasar sus panteones y bóvedas, en algunos casos para blanquearlos y en otros para vaciarlos y venderlos, en busca de una mejor inversión.

Descansar en paz en el cementerio de Recoleta tiene su costo: un nicho cuesta u$s5.500 y permite el ingreso de un ataúd y tres urnas con ceniza. Si, en cambio, se prefiere una bóveda los valores van desde los u$s23.000 hasta los u$s55.000 en la avenida principal, la misma que alberga a los restos del coronel Manuel Dorrego, Remedios de Escalada de San Martín, el almirante Guillermo Brown y el general Carlos de Alvear.

“El costo de mantenimiento incluye como mínimo de $1.300 anuales en promedio por la tasa de ABL y el sueldo de un cuidador, que debe ser personal autorizado del cementerio y puede valer desde $200 a $600 mensuales. Para vender una bóveda, lo más engorroso son los papeles, como un departamento hay que venderlo desocupado. Hace un año, sacar un cuerpo costaba $2.365 y el retiro de una urna $1.085”, señala María Reynal, propietaria de una inmobiliaria que lleva su nombre y ofrece diversas propuestas en el cementerio.

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