La red de subterráneos de la Ciudad de Buenos Aires no cuenta con partidas asignadas para su extensión en 2023, con lo que suma de esta forma el cuarto año consecutivo sin ampliaciones previstas para la red, en base al proyecto de Presupuesto enviado a la Legislatura porteña.
La Ley de Presupuesto, que será debatida en la Legislatura porteña el próximo jueves, no contempla asignaciones para obras de extensión, si bien cuenta con un ítem en los que prevé trabajos para “aumentar la oferta de transporte mejorando la red existente”.
Desde junio de 2019, cuando se inauguraron las estaciones Correo Central, Catalinas y Retiro de la línea E, no hay estaciones en obra en Buenos Aires, un hecho inédito que no se registraba desde 1973.
Pese a que Buenos Aires inauguró su primera línea de subtes en 1913 y se convirtió en la primera ciudad de América Latina en hacerlo, la extensión de vías se ha quedado estancada en 56,7 kilómetros, siendo superados por sistemas como el de Caracas (70,5 kilómetros), San Pablo (90 km) y Santiago de Chile (140 km), dentro de la región.
En el caso de Santiago de Chile, actualmente se encuentra en construcción la línea 7, con 26 kilómetros de extensión, en Sao Paulo la línea 6 de 15,3 kilómetros, mientras que en Madrid se prolongan las líneas 5 y 11.
“La no inclusión de las obras de subte en el presupuesto de 2023 vuelve a graficar la falta de una política de transporte y movilidad por parte del Pro que ha sido la peor gestión del subte de Buenos Aires de la historia”, dijo a Télam, Juan Manuel Valdés, legislador del Frente de Todos (FdT).
Si bien no hay partidas, abundan los proyectos para la red que aguardan financiamiento.
La línea H, cuya construcción inició en el año 2001, al día de hoy, continua inconclusa y sin llegar a sus cabeceras previstas (Sáenz y Retiro), realizando su recorrido únicamente entre las estaciones Facultad de Derecho y Hospitales.
En el caso de la extensión a Sáenz, la obra -que permitiría conectar al subte con la línea de trenes del Belgrano Sur- fue adjudicada a la UTE Techint-Dycasa en agosto de 2011, pero la misma al día de hoy, no registra ningún tipo de avance.
La proyectada línea F -que conectaría a Plaza Italia con el barrio de Barracas y la estación Constitución- corre la misma suerte: el presupuesto presentado para 2023 únicamente desliza que se prevé “desarrollar la ingeniería para la licitación de la línea”.
En junio de 2019, Subterráneos de Buenos Aires lanzó la primera licitación para elaborar el proyecto y los pliegos técnicos que se usarán para la respectiva licitación de la obra. No obstante, y tras 14 prorrogas, la misma fue dada de baja en mayo de este año.
El presupuesto tampoco hace mención a las líneas G (Retiro-Cid Campeador) e I (Caballito-Plaza Italia), las cuales están previstas por la Ley N°670, aprobada en el año 2001.
“(Fernando) de la Rúa y Enrique Olivera construyeron más subtes que (Mauricio) Macri y (Horacio) Rodríguez Larreta juntos, que no iniciaron ninguna línea nueva y solo terminaron las obras que venían de gestiones anteriores o que había comenzado el Gobierno nacional como la Línea E entre Bolívar y Retiro”, señaló Valdés.
El legislador detalló, haciendo referencia a la plataforma de campaña de Mauricio Macri en las elecciones de 2007, que “de los 10 kilómetros por año prometidos no llegaron a hacer ni 800 metros al año”.
“Es francamente decepcionante que una gestión que se dice ser de la vanguardia de las ideas de sustentabilidad de las ciudades grandes del mundo tenga una visión tan retrograda de la movilidad y el transporte público”, agregó el legislador.
Por su parte, Jonatan Baldiviezo, fundador del Observatorio del Derecho a la Ciudad cuestionó la falta de extensión del subte, medio al cual considera como el “más eficiente, rápido y ecológico”.
“El colapso de la conectividad de la ciudad es negado por el Gobierno de la Ciudad que continúa impulsando la sobre construcción y densidad demográfica sin adoptar medidas de acompañamiento de la infraestructura de servicios públicos, entre ellos el subte”, aseveró Baldiviezo.
Entre los trabajos previstos por el presupuesto 2023 se encuentra la finalización de obras para adecuar las instalaciones eléctricas de las líneas C y D, un nuevo sistema de señales para la línea D y mejoras en cocheras y talleres, lo cual, según promete el Gobierno porteño, permitiría “reducir los intervalos entre trenes” e “incrementar el volumen de pasajeros”.
Asimismo, se promete la compra de “25 nuevas formaciones para las líneas B y E”, la incorporación de ascensores en las estaciones Plaza de los Virreyes y Plaza Miserere, y una aplicación móvil.
No obstante, todas estas obras al igual que la mencionada app y la ingeniería de la línea F, vienen siendo descriptas desde el Presupuesto 2021 elaborado a fines de 2020, sin registrarse, en algunos casos, avances hasta el momento.
El foco de la política de transporte, en cambio, estará puesto en la finalización de los carriles exclusivos para colectivos denominados “Metrobus” en su nuevo tramo ubicado en las avenidas Paseo Colón y Almirante Brown.
“Han decidido destinar la inversión pública para adoptar medidas de tránsito como los carriles exclusivos en vez de mejorar estructuralmente el transporte de la ciudad con la extensión de la infraestructura del subte”, criticó María Eva Koutsovitis, ingeniera e investigadora del Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPYPP).
Desde la autonomía de la Ciudad, las gestiones de De la Rúa y Olivera inauguraron entre 1996 y 2000 la prolongación de la Línea D desde la estación Ministro Carranza hasta Congreso de Tucumán, en el barrio de Belgrano.
Tras ello, las administraciones de Aníbal Ibarra y Jorge Telerman entre 2000 y 2007 comenzaron e inauguraron el tramo Once-Caseros de la línea H, finalizaron las estaciones Tronador y Los Incas de la línea B, e iniciaron las extensiones a Villa Urquiza de la B y a San Pedrito de la A.
Los dos mandatos de Mauricio Macri marcaron la inauguración de las extensiones de las líneas B y A iniciadas por la anterior administración, y las estaciones Parque Patricios y Corrientes de la línea H.
Finalmente, en la primera gestión de Horacio Rodríguez Larreta se inauguraron tres estaciones de la línea H (entre Santa Fe y Facultad de Derecho) y 3 estaciones de la Línea E, cuya obra civil, no obstante, ya se encontraba finalizada en 2015 por el Gobierno Nacional.