Monserrat: el PO quiere ser querellante en la causa por los explosivos frente al Departamento de Policía
El Partido Obrero hará la presentación en el juzgado del juez Sebastián Ramos. El legislador porteño Gabriel Solano dijo: “La acusación a nuestro partido de ser responsables de ese hecho forma parte de una campaña de criminalización”.
El Partido Obrero hará la presentación en el juzgado del juez Sebastián Ramos. El legislador porteño Gabriel Solano dijo: “La acusación a nuestro partido de ser responsables de ese hecho forma parte de una campaña de criminalización”.
Este jueves a las 10 de la mañana el Partido Obrero se iba a presentar como querellante en la causa que investiga la colocación de artefactos explosivos en la puerta del Departamento Central de la Policía Federal Argentina (PFA), en Moreno al 1500 (Monserrat, Comuna 1).
El legislador porteño por el Frente de Izquierda (FIT) y dirigente del Partido Obrero, Gabriel Solano, dijo: “La acusación a nuestro partido de ser responsables de ese hecho forma parte de una campaña de criminalización de la lucha popular y, especialmente, de la movilización de 300.000 personas que 18 de diciembre protestó contra la reforma jubilatoria y por la que hay dos militantes de nuestra organización presos injustamente. A través de medios periodísticos hemos tomado nota de que por este caso hubo dos personas detenidas y luego liberadas mientras que a Arakaki y Dimas se les ha denegado la excarcelación y eximición de prisión”.
“Nos presentamos en la causa para reclamar que se clarifique quién pretendió acusar a nuestra organización de este hecho, colocando nuestra firma en el artefacto, con el objetivo de generar una falsa idea y amedrentar a la población respecto a nuestro partido y nuestro método político. El Juez debe desentrañar quién tiene la impunidad y libertad para colocar una bomba en la puerta del Departamento de Policía y si se trata de un pretendido ataque a una institución del Estado o, exactamente al revés, una agresión del Estado contra una organización que rechaza la política aplicada por el gobierno”, sumó el legislador porteño.
El primer viernes de enero pasadas las 17 fueron divisados dos artefactos explosivos sobre la calle Virrey Cevallos al 400, frente al departamento policial. Fueron vistos por un bombero de civil, quien se dio cuenta de la amenaza por el olor que desprendían los detonadores. Eran de procedencia artesanal y estaban camuflados en forma de paquetes, debajo de un carro de asalto de la Guardia de Infantería. El explosivo casero estaba armado con tres tubos de gas butano con un timer.
Del operativo para desarmar los explosivos participaron personal de Bomberos de la Policía y de la División de Explosivos. El hecho es investigado por la División de Intimidación Pública que estudia las cámaras de seguridad de la zona para tratar de dar con los responsables del atentado.