La vidriera de arte que nunca duerme en el corazón gastronómico de Almagro

La artista y docente Milagro Torreblanca es la creadora de Una Obra Un Artista (1O1A), una vidriera de arte abierta las 24 horas. Está en la ochava sureste de Guardia Vieja y Bustamante, en el corazón del polo gastronómico y cultural de Almagro (Comuna 5).

Los vecinos pueden disfrutar de esta experiencia en cualquier momento. De mañana, tarde o noche. Con la luz del sol o los focos del local. Cada veinte días se exhibe una nueva pintura, dibujo, fotografía en la esquina de este edificio de viviendas.

“Esto es una vidriera de arte para que la gente lo disfrute en cualquier horario. Siempre hay mucha variedad en cuanto a temáticas, disciplinas, materiales. Es un espacio mínimo, pero muy potente”, asegura Torreblanca.

Al comienzo, muchos vecinos no terminaban de entender la dinámica. Varias exhibiciones después, le tomaron el gusto. Algunos ahora cambian su recorrido diario para pasar y ver la vidriera de cerca. “Muchos no frecuentan museos o galerías, no porque no les guste el arte, sino porque sienten que es para entendidos, para un grupo selecto. En cambio, acá cada cual se toma su tiempo. El trabajo del artista y el público están frente a frente. Listo. Nada más. No hay ningún ruido externo. Te podés tomar todo el tiempo que quieras para mirar, para apreciar”.

Antes de habitar esta vistosa ochava, el proyecto se alojó en un local de Guardia Vieja Casi Gallo. Allí estuvo desde fines de 2017 hasta hace algunas semanas. Antes, 1O1A estuvo en otra ochava, la de Lafinur 3248 de Palermo (Comuna 14).

En ambos barrios lo hizo con el programa de Mecenazgo Cultural del Gobierno porteño. Fue la concreción de una idea que venía desarrollando desde fines de los años ochenta cuando caminaba por las calles de Recoleta (Comuna 2) para ir a estudiar a la Escuela de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón, donde se recibió.

“Una Obra Un Artista se posicionó como un lugar atípico, alternativo de exhibición. Es raro que sea una sola obra. Es una mini mini galería, la más chiquita del universo”, dice Milagro.

Hace notar que “lo importante es la obra”. Por eso el nombre del trabajo va primero, luego, más chico, el del artista. Son detalles que hacen al proyecto. Como la ausencia total de otros objetos que entorpezcan la vista del público callejero.

Milagro asegura que lo importante es tener algo que decir. Eso es lo que busca ella a la hora de elegir a los artistas que expondrán. En general, suelen ser emergentes, voces nuevas que con distintas técnicas logran mensajes inquietantes. Muchos ya conocían la dinámica de 1O1A, pero otros hasta último momento estaban en la duda sobre qué obra exhibir.

También hay lugar para los consagrados. Juan Doffo, Adriana Cora, Ricardo Roux, Laura Messing, Gerardo Feldstein, Vanina Prajs, Marcelo Pelissier, Adriana Gibello, son algunos de los nombres que han puesto su arte al alcance de los vecinos porteños. “Quisieron estar acá porque les gustó la propuesta. Hay trabajos suyos en galerías y museos. Esto lo viven como otra manera de mostrar”, indica Milagro.

“Los vecinos saben que va a cambiar la obra, están a la expectativa”, concluye Milagro con orgullo.

Fuente: Agenda Porteña