Inauguran el monumento a Juana Azurduy en Casa Rosada

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner inaugurará este miércoles una estatua en homenaje a Juana Azurduy, en reemplazo del monumento a Cristóbal Colón, reubicado en Costanera Norte tras un acuerdo con el gobierno porteño. CFK compartirá el acto con su par boliviano, Evo Morales, quien llegará al país para mantener el “último encuentro bilateral” con la mandataria antes de finalizar su mandato.

La información fue confirmada por el embajador argentino Bolivia, Ariel Basteiro, quien anticipó que en el encuentro entre los dos presidentes se firmará una “docena” de convenios referidos al sector energético, salud, obras públicas, gas y petróleo, y cooperación mutua en la explotación de hidrocarburos.

La estatua de Azurduy, que quedará instalada en la Plaza Colón, ubicada en el sector trasero de la Casa de Gobierno, pesa 25 toneladas, mide 9,5 metros de altura y está hecha en bronce, es obra del escultor argentino Andrés Zerner y contó con un aporte del gobierno de Evo Morales de un millón de dólares para su financiación.

La figura, emplazada en la misma base donde estaba la de Colón, muestra a Azurduy alzando una espada y mirando hacia la Casa de Gobierno, a diferencia de la del explorador genovés que se encontraba orientada hacia el río.

Por último, Cristina y Morales participarán de una cena de agasajo a la comitiva boliviana, que se realizará en el Museo del Bicentenario, ubicado en el subsuelo de la casa de Gobierno.

La decisión de la Presidenta de retirar la figura de Colón desató hace dos años una fuerte polémica con la comunidad italiana en Argentina, quien recibió con malestar la noticia de la remoción de la histórica estatua de mármol de Carrara, que había sido obsequiada por el país europeo en 1910 como agradecimiento a la recepción de inmigrantes italianos.

La jefa de Estado dispuso eso tiempo después de una reunión que mantuvo en la Rosada con el entonces mandatario venezolano Hugo Chávez, quien se asomó por la ventana y al ver la estatua de Colón, le preguntó “¿Qué hace allí ese genocida?”, en alusión a la matanza de aborígenes llevada a cabo durante la conquista de América.

La comunidad italiana presentó dos recursos de amparo y montó varias manifestaciones para reclamar que se mantenga a Colón en su lugar original.

Tras más de un año y medio de idas y vueltas, los gobiernos nacional y porteño llegaron a un acuerdo en la Legislatura, donde los bloques kirchnerista y macrista votaron a favor de la mudanza definitiva de Colón, que se ubicará en Costanera norte, frente al predio del Aeroparque Metropolitano.

Respecto la llegada de Morales al país, el embajador Basteiro adelantó que se firmarán un “importante” número de acuerdos bilaterales que “engalanan y enaltecen este encuentro que se llevará adelante”, al realizar declaraciones al Diario Cambio, de La Paz.

“Será el último encuentro bilateral entre los dos presidentes, ya que la presidenta de Argentina termina su mandato el 10 de diciembre y por eso el encuentro tiene un doble significado”, precisó Basteiro.

Por último, los dos presidentes saldrán a la Plaza Colón -que pasará a llamarse Azurduy-, ubicada detrás de la sede gubernamental, donde descubrirán el monumento a la histórica mujer aborigen de origen boliviano que peleó contra las tropas españolas durante la independencia del virreinato del Río de la Plata.