Línea F: primeros pasos para conectar en subte los barrios de Barracas, Palermo y Belgrano
La empresa estatal Subterráneos de Buenos Aires hará un llamado a licitación pública para desarrollar la ingeniería de la futura ampliación de la red.
La empresa estatal Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) hará un llamado a licitación pública para desarrollar la ingeniería de la futura Línea F de subtes porteños, que conectará Barracas (Comuna 4) con Palermo (Comuna 14); con una opción de extensión a Barrancas de Belgrano (Comuna 13), a metros de donde está la flamante estación Belgrano C del viaducto del tren Mitre.
Esta acción ocurre mientras se desarrolla el demorado proceso de licitación pública internacional para elegir al futuro operador y concesionario del subte, ya que en diciembre de este año (luego de varias reprogramaciones) vence el contrato que tiene la empresa Metrovías.
El 8 de noviembre de 2001 se aprobó la Ley porteña N° 670 que autoriza al Poder Ejecutivo a la construcción de nuevas líneas de subterráneos que vinculen en su trayecto, entre otros, a los barrios de Barracas, Constitución, Recoleta y Palermo, denominada Línea “F”; los barrios de Retiro, Caballito, Villa del Parque y Agronomía, denominada Línea “G”; y los barrios de Parque Chacabuco, Villa Crespo, Palermo, Retiro y/o Núñez, denominada Línea “I”, todas a través de las trazas que se adjuntan como Anexo I, formando parte integrante de la presente ley.
En el Anexo de la Ley se expone sobre la Línea F: “Estación Constitución – Plaza Italia (8,6 km. 13 estaciones). La línea parte de Constitución desde allí toma el eje de la avenida Juan de Garay hasta su intersección con la calle Solís, donde comienza una curva para alinearse con la avenida Entre Ríos. La traza continúa por la avenida Entre Ríos – Callao hasta su intersección con la calle Pacheco de Melo, donde comienza a orientarse hacia el eje de la avenida Las Heras, teniendo como estación final Plaza Italia. En la segunda etapa, el eje se orientaría bajo la avenida Montes de Oca y/o Vélez Sársfield hasta su intersección con California”.
En noviembre, Eduardo de Montmollin, presidente de la empresa estatal, confirmó que hay conversaciones avanzadas con la Corporación Andina de Fomento (CAF) para “obtener un crédito que permita financiar los estudios de ingeniería de la línea F”, lo que consideró el “paso previo a licitar”, consignó En El Subte.
Entre 2014 y 2015 la consultora Systra tuvo a su cargo la elaboración de los estudios de prefactibilidad.
En noviembre pasado el portal citado refería sobre la forma de la traza. El primer tramo, Barracas – Constitución, se haría elevado en viaducto “entre los dos tableros de la autopista Nueve de Julio Sur – Presidente Frondizi”, con cocheras que también se ubicarían en superficie en un lugar a definir. Esto, calculaban en SBASE, permitiría abaratar los costos de la obra en una proporción importante.
El espacio dejado entre ambas manos de la autopista fue originalmente pensado para albergar una línea de Subte. Así se preveía en los proyectos de Guillermo Laura, secretario de Obras Públicas de la municipalidad durante la última dictadura cívico militar y “creador” de la red de autopistas porteñas. El concepto de construir Subte y autopista en paralelo, aunque en subterráneo, sólo prosperó en el último tramo de la línea E (Emilio Mitre – Plaza de los Virreyes).
El tramo de Constitución a Barrancas de Belgrano sería soterrado, siguiendo lo originalmente previsto en la ley 670: bajo la traza de las avenidas Garay, Entre Ríos/Callao y Las Heras hasta Plaza Italia, desechándose la posibilidad de que la línea termine en Facultad de Derecho, como se propuso hace algunos años.
Otra de las novedades es que, en lugar de finalizar en Plaza Italia, la línea continuaría bajo la avenida Santa Fe hasta la estación Palermo de la línea San Martín. Esta opción permitiría, en una segunda etapa, prolongarla por la avenida Luis María Campos hasta Barrancas de Belgrano.