Ciudad informó que en el primer semestre duplicó las clausuras por infracciones ambientales
La cantidad de fajas de clausura colocadas en diferentes actividades comerciales creció un 110% en el primer semestre del año.
La cantidad de fajas de clausura colocadas en diferentes actividades comerciales creció un 110% en el primer semestre del año.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires informó que durante el primer semestre de 2017 el Ministerio de Ambiente y Espacio Público, a través del cuerpo de Control de su Agencia de Protección Ambiental (APrA), inspeccionó 30.908 actividades comerciales (comercios, industrias, vehículos de gran porte), un 15% más que durante el mismo período del año pasado. Detectaron 5.894 infracciones, es decir, un 32.6% más que las 4.445 hechas el año pasado. En 218 casos, se optó por colocar faja de clausura, un 110% más que las 104 del primer semestre del 2016.
En relación a las clausuras, el primer puesto en cantidad de fajas colocadas corresponde a ruido. Este primer semestre se clausuraron 60 locales por este motivo, principalmente habilitados como café o bares (incluyen boliches nocturnos), restaurantes, supermercados y bancos. El motivo de la clausura, generalmente, está relacionado con extractores de cocina o grandes equipos de aire acondicionado.
Ante este panorama, el presidente de la APrA, Juan Bautista Filgueira Risso, explicó: “Estamos mejorando los controles ambientales no sólo en cantidad sino en calidad. Entendemos que las inspecciones, clausuras y actas tienen un fuerte efecto preventivo. Si uno sabe que está haciendo algo mal y no sucede nada con ello, difícilmente vaya a revertirlo. Si se sabe que tiene consecuencias, probablemente se evita caer en esa falencia”.
Filgueira Risso agregó: “Estamos generando un trabajo de investigación y análisis de datos que nos permite actuar sobre casos donde hay más probabilidad de faltas graves. Prueba de ello es que las actas labradas han crecido un 32.6%, pero las clausuras se han duplicado”.
Federico Iglesias, director general de Control Ambiental de la APrA, explicó: “Ahora se usan checklist donde se indica el estado de los diferentes puntos que se revisan. Ese documento firmado se escanea y se genera un expediente electrónico. La incorporación de las tablets va a evitar todo ese proceso manual, y va a reducir considerablemente el uso del papel”.