Avogadro frenó los cambios en los premios municipales y sigue el diálogo con referentes culturales
El ministro porteño dijo que habrá más tiempo para discutir a fin de tener una “reforma robusta que tenga el consenso del sector”. Uno de los puntos más polémicos fue el de los subsidios que se entregan a los ganadores de manera vitalicia.
El ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, Enrique Avogadro, informó que no se tratará el proyecto de Ley impulsado recientemente para modificar aspectos sustanciales de los llamados premios municipales (literatura, teatro, entre otros) ante la queja de entidades y referentes de la cultura local.
“Nos pareció prudente responder el pedido que nos hicieron las organizaciones de la cultura y postergar el tratamiento de la Ley”, dijo el funcionario.
Avogadro se reunió con entidades y referentes culturales en el Teatro Colón este martes, luego de varias protestas, y precisó que “dada la controversia que se generó, decidí participar de manera personal, dar la cara, como corresponde, para conversar ya que son instituciones con las que tenemos relaciones desde hace mucho tiempo”.
“Por un lado hubo un consenso respecto de la necesidad de modificar los premios, pero también hubo -y con más fuerza- un reclamo de contar con más tiempo para tratar estas cuestiones”, señaló y dijo que decidió postergar el tema para el año próximo dado que “es importante tener una reforma robusta que tenga el consenso del sector”, consigna Télam.
Entre las propuestas, se subía el monto de los galardones: de $70.000 para el primer premio a $500.000. En lugar de hacerlo cada dos años, se planificó hacerlo de forma anual en todas las categorías. Se discontinuaban algunos concursos y se ampliaban otros.
No obstante, el punto de mayor polémica fue el sistema de subsidios que se entregan a los ganadores de manera vitalicia. Se establecía que el beneficio solo podrá ser cobrado por aquellos artistas a partir de los 60 años de edad en el caso que sean mujeres y 65 años para los hombres, cuando en la actualidad es a los 50.
Otro tema fue que dejaba de ser hereditario para el o la cónyuge ante el fallecimiento del titular y solo iban a tener “derecho a una asignación equivalente al 50% los hijos menores de edad e hijos con discapacidad” y no iba a ser acumulable con una jubilación.