A metros de Plaza Flores se reúnen para jugar rol y cartas Pokemon: “Se trata de divertirse y aprender”
Una comiquería abre sus puertas para que los vecinos jueguen en forma gratuita.
Están por dar las ocho, hora en que Misato Comics de Flores (Yerbal 2354, Comuna 7) cierra sus puertas, pero esta es noche de juegos de mesa, tal como ocurre los jueves cada 15 días. En vez de bajar la persiana, Leo, uno de sus referentes, acomoda un tablón y varias sillas en el centro del local, abarrotado de estantes con libros, muñecos y discos. Los más tempraneros aparecen al rato y ya se arman las primeras partidas.
“La comiquería está hace seis años, es de mi esposa Carla, yo me dediqué a lo que son juegos de carta y de mesa desde hace tres. Los distribuidores traían material y se fue dando de forma natural. Acá la gente viene a jugar gratis y a aprender”, explica.
“Organizamos torneos oficiales de cartas Pokemon (popular serie de animación japonesa que hace 25 años tiene este juego de cartas como complemento). Rendí un examen y eso nos habilita a organizar torneos que sirven para sumar puntos a quienes quieran ir a los torneos mundiales. Todos los sábados a la tarde se llena de gente, grandes y chicos, para aprender y jugar partidas”, agrega.
Sobre un aparador lleno de libros de historietas japonesas (manga) hay varias cajas con los juegos de mesa de Bureau de Juegos, desarrolladores locales que tienen sede en Villa Crespo (Comuna 15). “Ellos empezaron a la par de la comiquería, de hecho trajeron sus primeros juegos a vender acá, hoy tienen licencias de juegos internacionales que la rompen”, dice Leo.
Santiago es vecino de Flores. Cuando anda con tiempo, pasa a jugar en Misato. “Lo que más me gusta son los juegos de rol, donde tenés un personaje y lo tenés que hacer interactuar con los de los demás. En la medida que tengas una estrategia la partida va a ser divertida”, cuenta.
Sobre el tablón hay varios jóvenes que hace rato empezaron una partida de King of Tokyo, de Bureau. “Cada uno es un monstruo gigante, se tienen que pelear para dominar la ciudad”, resumen. Cada cual tiene un personaje asignado (con un muñeco de cartón identificatorio). Hay cartas y cada cual va tirando dados. Entre risas se retan, se alienta, comparten enojos sobre la ficción que acaban de crear en su mente gracias a la dinámica del juego.
Sobre que haya en el barrio de Flores un espacio para jugar cartas, rol y distintos tipos de juegos de mesa, Leo dice: “Abrir las puertas de la comiquería para que la gente venga implica varias cosas. Para Bureau o cualquier fabricante es la posibilidad de dar a conocer su producto. Para los vecinos o la gente que se acerca de todos lados es tener un momento en la semana de distención, de conocer gente y aprender juegos nuevos”.
“Hay juegos tradicionales como los naipes, pero cuando son juegos más desarrollados o con más reglas se abre una gama de posibilidades. Cuando viene alguien por primera vez escucho cuáles son sus inquietudes e intereses. Este tipo de juegos apunta a lo particular de cada uno”, suma.
Guillermo también es vecino de Flores y de chico jugaba naipes y juegos como el Life (el Juego de la Vida). Desde que viene a Misato encontró otros juegos con los que entretenerse. “Me gusta uno que se llama Tsukiji porque sos dueño de un restaurante japonés y tenés que subir y bajar precios, pelearte con otros comerciantes y sacar ventaja; es un desafío pensar estrategias o maniobras que en la vida real no harías”, suma.
“Los juegos acá son variados, divertidos. Me gusta venir porque es un lindo rato para pasar y mejorar en los juegos que ya venís o para probar nuevos”, concluye.